Su nombre en polaco significa “la que se esconde con frecuencia”. Es la única ciudad que se defendió con éxito durante la guerra llamada “la inundación sueca”. A menudo recibe el nombre de capital espiritual de Polonia porque atrae a peregrinos y turistas de todo el mundo que acuden en masa al santuario de la Virgen María, situado en el Monasterio paulino de Jasna Góra (Montana Clara). La Capilla del Cuadro de los Milagros contiene en su interior el icono de la Virgen María con el niño Jesus, conocido con el nombre de la Virgen Negra, y que atrae con su fama a millones de peregrinos cada año. El museo monástico conserva numerosas obras de arte y objetos votivos. Desde Czestochowa el turista puede continuar su camino a lo largo de la llanura de Cracovia-Czestochowa, muy adecuada para recorridos a pie, escalar, montar en bicicleta o practicar la equitación.